Apagué antes de despertar el despertador. No se porqué ya no puedo recordarte. El milagro de poder verte por mil minutos. Me pregunto si, antes de saberlo, lo olvidaré. ¿Terminaré olvidando hasta lo olvidado?. Días divinos. En la habitación del bolsillo de mi corazón, busco tu tibieza desvanecida. Aunque no exista manera de que te sienta de nuevo, cierro con llave esos días aún tibios…
[No está escrito por mi]